Si tus necesidades de movilidad son diferentes a lo largo del mes, ¿por qué tu automóvil tiene que ser siempre el mismo? Imagina pagar una cuota mensual para poder disfrutar de un vehículo compacto en la ciudad, un SUV durante los fines de semana o un descapotable en las cálidas noches de verano... Imagina una industria del automóvil que deja de tener una relación transaccional con sus clientes por otra donde mantiene una relación permanente con ellos. ¡Acompáñanos y te lo contamos! Los clientes “se hacen” de los automóviles Uno de los factores que más condiciona el proceso de compra de un automóvil (y lo prolonga) es la gestión del compromiso. Un SUV de siete plazas es una estupenda solución para pasar un fin de semana con los amigos o para llevar un remolque. Pero no es el vehículo idóneo para el tráfico urbano. Un descapotable puede ser una elección perfecta para un fin de semana en pareja, pero también puede convertirse en un calvario si tratas de aparcarlo en zonas poco seguras.Un vehículo 100% eléctrico es una gran solución para el día a día, pero tiene sus limitaciones para viajes largos. En un mundo ideal, el cliente dispondría de una flota de vehículos seminuevos a su disposición para poder de utilizarlos en función de sus necesidades específicas en cada momento. Pero, además, los clientes “se hacen” de los coches. Pasados algunos años, y aunque su “vehículo ideal” no esté en mal estado, mucho clientes se agarran a cualquier anomalía de funcionamiento para justificar un cambio de coche: “¡A partir de ahora no va a dar más que problemas! Los clientes son sensibles a la evolución de los productos y a las novedades. Eso sería excelente para la industria del automóvil, si ésta estuviera en condiciones de aprovechar todas las oportunidades que brinda ese comportamiento del cliente. En un mundo ideal, el cambio de coche debería ser una experiencia fácil y conveniente, tanto desde el punto de vista logístico como en términos financieros y burocráticos. Descubre ese "mundo ideal" Clutch Technologies es una empresa de Atlanta que comercializa una plataforma electrónica para fabricantes de vehículos y concesionarios que prestan servicios de suscripción a sus clientes. Por ejemplo, el grupo de retail Flow Automotive, que gestiona 38 concesionarios de 19 marcas, ofrece el servicio Drive Flow basado en el concepto y la tecnología de Clutch. Drive Flow se presenta al mercado, a los automovilistas, como una alternativa a la compra o al “lease” de vehículos. No es un compromiso a largo plazo, ya que los usuarios pagan un cuota inicial (250 dólares) y luego pueden suscribir mensualmente al servicio o cancelarlo cuando lo deseen. Los importes de la mensualidad oscilan entre los 450, 950 y 1.450 dólares. Incluye seguro, mantenimiento, lavado, kilometraje y cambios ilimitados de vehículos por parte de un equipo de “asistentes” de Drive Flow. El usuario del servicio puede gestionar el cambio de vehículo a través de la aplicación “Drive Clutch” o mediante mensajes enviados directamente al equipo de “Asistentes”. De esta manera, el cliente accede a una flota de vehículos, mediante el pago una cuota constante y muy pocas dificultades para hacer el cambio de coche. Con los programas de suscripción, los concesionarios dejan de tener una relación transacciones con sus clientes para pasar a tener la oportunidad casi permanente de estar en contacto con sus expectativas y preferencias. Además, este modelo de suscripción es una vía de salida casi inmediato para los vehículos al final del contrato de financiación que regresan al concesionario. En el futuro habrá más alternativas de movilidad, especialmente en el entorno urbano. Las soluciones de movilidad compartida como el Car-Sharing, el Car-Pooling o el Ride-Hailing favorecen la movilidad en detrimento de la especificidad del vehículo que la presta. En el límite, estas soluciones condenan a la industria del automóvil a la producción de hardware para el transporte, desvalorizando los productos y las marcas. Si los constructores de vehículos y sus redes de concesionarios pretenden seguir fomentando el rentable segmento de la movilidad individual tendrán que encontrar alternativas a los inflexibles y burocráticos métodos tradicionales de compra y alquiler de vehículos. ¡El concepto de suscripción apoyado por una tecnología dedicada es claramente un camino de oportunidades a explorar! Ricardo Oliveira Una herramienta para ayudar a los profesionales, inversores y emprendedores a identificar oportunidades en la disrupción del automóvil.
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February 2020
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